¿DONDE ESTAS HERMANO?
Es una comedia que el público de los Estados Unidos puede llegar a apreciar mucho más que el resto de los Cineastas; debido a su localismo. “Esta interpretación es una historia muy norteamericana. Es específica de una región y una época. Pero, por otra parte, está basada sobre una historia que todos conocemos” ha dicho Joel Coen, director del filme junto a su hermano Ethan; y a decir verdad, el comentario da cuenta de un inconveniente de la puesta, más que de un logro. La región, a la que hace referencia Coen, es el sur norteamericano, la época, los años treinta y la base de la narración – una versión más que libre, hay que decirlo- es La Odisea, de Homero.
SIPNOSIS
Tres convictos - Everett Ulysses McGill (George Clooney), Delmar (Tim Blake Nelson) y Pete (John Turturro) - escapan de una cárcel de Mississippi para ir en busca de un tesoro. En el camino los evadidos se cruzan con varios personajes, entre ellos, un músico (Chris Thomas King) que busca una radio (te pagan para cantar frente a un metal, dice); un curioso vendedor de Biblias tuerto (John Goodman); un gangster (Michael Badalucco) que hace amistad con ellos en medio de un tiroteo; la ex esposa de Everett (Holly Hunter); y el Gobernador Pappy O'Daniel (Charles Durning) dedicado a tiempo completo a la campaña por la reelección.
Las referencias al clásico griego aparecen en la forma de inserta de personajes alegóricos (el tuerto, de Goodman, es el cíclope, por ejemplo), los cuales sirven sólo remotamente para guiar la imaginación hacia La Odisea. La escena con las sirenas – que no deja de ser original y bien filmada - seguramente desconcertará a más de un espectador (a quien escribe le paso) pues sobreviene tan abruptamente e instaura un breve clima entre onírico y mágico que hasta ese momento no se había dado en el filme y que después de eso tampoco volverá a repetirse.
La música y los temas musicales de la puesta, a cargo de T Bone Burnett, si merecen un párrafo a parte. Canciones country, blues y spirituals conforman una estructura musical sólida. Burnett tuvo el tino de reunir a músicos de la talla de Ralph Stanley, Gillian Welch, John Hartford, Alison Krause, Emmylou Harris, y Norman Blake. El resultado es bueno porque los temas se disfrutan más que la película y le agregan valor a la narración.
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